viernes, 18 de marzo de 2011

Nunca hay un porque para un recuerdo...

He cometido tantos errores... He llorado por quien no debía y he reído con falsas amistades. He tropezado dos veces con la misma piedra y cuando pensaba que no lo haría más me empujaron y caí con la tercera. He perdonado mucho, hasta que me cansé. He callado te quieros por miedo o por insegurad i se quedaron en el aire... y he regalado te quieros simplemente por cumplir. Ha habido veces que me he despertado con ganas de comerme el mundo y otras que parece que el mundo iba a comerme a mi. He gritado con fuerza, pero a veces mi voz no salía. He callado verdades por no hacer daño, he salido sin ganas de fiesta y he vuelto con los zapatos rotos y sin dinero en la cartera. Hay días que dormía solo para poder verte en sueños y días en los que no podía dormir pensando que a la mañana siguiente te tendría a mi lado. He pasado por fases, por muchas... he sido una niñata inmadura e insensible que solo quería vivir la vida así como era y he madurado a base de palos. He creído en lo imposible hasta que se destrozaron mis metas. He abrazado a la persona que pensé que nunca me haría daño y me he dado cuenta que esa persona no se merecía ni el roce de mi piel. He besado con dulzura, con pasión... He cantado en la ducha hasta que ya no podía más. Ha habido días que me sentía preciosa y otros que no quería ni mirarme al espejo. He disfrutado de pequeños detalles... y he aprendido poco a poco en qué consiste la vida, también he descubierto el secreto. El secreto de la vida está en no arrepentirse de nada y afrontarlo todo con una sonrisa, está en querer a quien te quiere... el secreto de la vida está en vivirla.

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